martes, 6 de enero de 2015

Ya vienen los Reyes Magos cargaditos de Roscón.


Llevamos comiendo dulces todas las Navidades, pero todavía nos queda por hacer un último esfuerzo (o no tanto). Para despedir estas fechas como se merecen hay que hacer un hueco al Roscón de Reyes.




Aparte de las caras de emoción de los niños ante la llegada de los Reyes Magos y de todos los regalos, el gran protagonista del día 6 de Enero, es el Roscón. Rellenos de nata, crema, trufa o solos, pero siempre con su sorpresa y su aroma a azahar estará presente en postres, desayunos y meriendas.





Y es que nada mejor que despertar el día de Reyes con un dulce sabor en la boca después de una noche mágica y llena de emociones para pequeños y grandes.












Yo recuerdo como mis padres el día 5 por la tarde nos llevaban a mi hermano y a mí a ver la cabalgata al centro de Madrid.









Mi padre protestando por la cantidad de gente que había, mi madre pendiente de nosotros recordándonos que no nos soltáramos.






Y mi hermano y yo emocionados antes esas carrozas llenas de luces, los camellos que venían en ellas y como no ilusionados y algo atemorizados ante la presencia de los Reyes Magos, que todo lo sabían de nosotros.



Luego una vez en casa  después de haber dejado agua para los camellos y algo de dulce para los Reyes que hacían ese largo viaje para traernos regalos había que acostarse pronto. Recuerdo sobre todo una de esas noches de Reyes a mi madre dándome un beso de buenas noches y tapándome bien con la manta para que no cogiera frío, todo el amor que me transmitió en un segundo con sus ojos llenos de emoción. Me lleno de paz y felicidad y de vez en cuando sigo pensando en ese momento porque me llena de vida. Se que soy una sentimental pero no puedo negar que les quiero mucho y que cuando te conviertes en madre te das mucho más cuenta de lo que tus padres te quieren a ti.

Que nervios, llegan los reyes



Lo que quería contaros es que después de ver la cabalgata y dejar algo de comida a los Reyes, el día 6 nos despertábamos con las voces de mis padres de "Venga chicos, que han venido los reyes" y con el aroma del Roscón de Reyes para desayunar.








Esta tradición la seguimos manteniendo. Cuando mi hija era pequeña viviendola con mucha ilusión y ahora que es adolescente también se hace. Seguimos reuniéndonos el 5 de Enero por la tarde con mis padres y mi hermano para ver la Cabalgata pero ahora la del barrio en directo y la del centro por la tele y para merendar el maravillosos Roscón de Reyes con una taza de chocolate caliente.






Y es que el Roscón de reyes se convierte en protagonista en cuanto a comida se refiere el 5 y 6 de Enero. Un dulce que pone fin a la Navidad y que tiene una gran historia.






Su historia se remonta a los romanos, concretamente al siglo II antes de Cristo y a unas fiestas paganas, nada religiosas, conocidas como "Las Saturnales". Se realizaban en homenaje a Saturno, dios de la agricultura, para festejar la finalización del solsticio de invierno  y el comienzo de los días más largos. Eran fechas en la que los esclavos podían descansar de sus tareas y para estas fiestas preparaban unas tortas redondas de miel que se rellenaban de frutos secos, dátiles, higos...como regalo por el trabajo bien hecho.




Ya en el siglo III después de Cristo es cuando se introduce el haba seca como símbolo de prosperidad y fertilidad. El afortunado que la encontraba era nombrado Rey de Reyes porque le esperaba un año de prosperidad.
Tras finalizar la persecución a los romanos e imponerse esta religión como la oficial en el Imperio Romano, en el siglo IV, muchas de las fiestas paganas desaparecieron, como las saturnales. Pero la costumbre de la torta y el haba no desapareció del todo. Fue en Francia donde quedo arraigada, convirtiéndose en toda una tradición entre la aristocracia y realeza gala.




Las familias se reunían para comerlo y ver quien era el afortunado al que le salía tan apreciada haba, al que se le llamaba "Le roy de la Fave" o "rey del haba" y al que se le premiaba con un regalo.



Años después, ya en el siglo XIII, el roscón adquirió mas popularidad gracias al cocinero del rey francés Luis XIV. Y es que el cocinero para agasajar al pequeño rey introdujo una sorpresa en el roscón un medallón de oro y rubíes. Fue el propio rey quien dió a conocer el roscón entre la aristocracia francesa y europea pero sustituyendo el medallón por una moneda. A partir de hay todo el mundo quería que le tocase el premio y no el haba, que empezó a adquirir un valor negativo.



En España quien introdujo la tradición del roscón fue su tío Felipe V. Y fue él quien estableció la costumbre de comer dicho roscón el día de reyes.







Con el tiempo, ya en el siglo XIX,  la moneda fue sustituida por una figurita y al que le salí la figurita era coronado "rey de la fiesta", mientras que al que le salia el haba debía de pagar el postre además de ser nombrado "El tonto del Haba", ya sabemos de donde viene el insulto "tontolaba".











No solo el valor del haba ha cambiado con el tiempo, también han cambiado sus ingredientes. Atrás quedaron los dátiles, miel e higos de los romanos, ahora son rellenados de nata principalmente y cubiertos de fruta escarchada. pero no podemos prescindir de ellos para despedir estas fiestas tal y como se merecen.














Ingredientes:

Masa Madre:
.70 gr leche
.1 cucharadita azúcar
.10 gr. levadura fresca
.120 gr. harina de fuerza

Resto:
.60 gr. leche
.90 gr. mantequilla
.20 gr. levadura fresca
.450 gr. harina fuerza
.2 huevos L
.Ralladura 1 limón y 2 naranjas
.1 palo de canela
.25 gr. agua azahar
.2 pizcas sal
.Huevo para pintar la masa
.Azúcar humedecida, fruta escarchada y almendras en láminas para decorar

Preparación en Thermomix:

Masa Madre
-Leche y azúcar 2 min. 37º, velocidad 1.
-Añadir la levadura 4 seg. velocidad 4.
-Agrega la harina 1 min. espiga. Ponla en un bol y tapa con papel film en un lugar cálido unas 3 horas.



Resto:
-Pon el azúcar y pulveriza 30 seg. velocidad 5-10. Añade la piel de de una naranja y de medio limón 15 seg. velocidad 10. Reserva.
-Infusiona la leche, pon la leche, la piel de la otra naranja y del medio limón, el palo de canela y programa 5 min. 90º, giro izquierda, velocidad cuchara. Deja templar.
-Calienta la leche infusionada y la mantequilla 3 min. 37º, velocidad 1.
-Añade los 20 gr. de levadura 4 seg, velocidad 4.
-Agrega harina, huevos, azúcar pulverizada, agua de azahar, sal y la masa madre (por este orden) programa 4 min. espiga.
-Coloca en un bol, tapa con film y deja reposar en un lugar cálido unas 3 horas, hasta que doble el volumen de la masa. También puedes dejarla toda la noche en la nevera.


-Queda una masa bastante pegajosa, pon un poco de harina en la encimera y amasa un poco para quitarle el aire. ponte aceite en las manos para que no se te pegue tanto la masa.


-Dale a la masa forma de rosca con un buen diámetro en el centro, tapa y deja reposar 1 hora.


-Pincela con huevo batido con sumo cuidado.
-Decora con azúcar humedecida con unas gotas de agua, fruta escarchada y almendras en láminas.


-Hornea a 180º unos 20-25 minutos. Para que no se seque puedes poner un cacharrito con agua en el fondo del horno para que no se seque mucho la masa.


El resultado es un delicioso y espectacular Roscón de Reyes que no tiene que envidiar nada al de las pastelerías.


Comete un trozo de roscón y vuelve a sentirte como un niño en el Día de Reyes. ¡¡ Feliz Día de Reyes !!






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